diminutos rayos de luz se inclinan en mi
carcomen los bordes de mi eterna soledad
me siento en la esquina mas oscura
para así no imaginarte mas
los días que pasan eternamente me recuerdan
la promesa que ya había olvidado
pero como el olvido esta echo para olvidar
me siento en la esquina mas oscura
para asi no imaginarte mas
el tiempo en su clara sabiduría
me regala una sonrisa,
me regala una mentira
para así volver a mi vida
la tonada de tus voz grabada en mi memoria
devora mi paz, devora mi alma
las esquinas de mi cuarto oscuro se desmoronan
mientras que mi voz, se escapa en un grito de dolor
mientras que mi vida, se escurre por las rendijas de mi alma partida.
