domingo, 20 de marzo de 2011

capitulo 1 Neo y la escuela de sangre

 Hay sueños, que jamas se olvidan, en mi caso son muy borrosos como una memoria, que se ve a lo lejos de mi propio ser; una guitarra y una canción, algo que deseo, algo que no poseo; desearía poder alcanzar y aclara todas esas lagunas. Mi vida a sido sencilla desde mi infancia, unos padres buenos, grandes amigos y ahora mi primer amor, que lo conocí en este lugar, su nombre Sabina, hermosa en verdad, ella es la mujer perfecta.

-Hey Neo!, deja de andar en las nubes, ella es un imposible para los tipos como nosotros-el único problema con mi amada Sabina era su nivel, en nuestro instituto es famoso por las tres grandes casas: la blanca, la azul, la negra y la ultima la roja (a la cual pertenezco equivocadamente): estas se dividen por es escalas sociales: los bronce (los que son como yo que son los esclavos de los demás), los plata (que solo sirven a los superiores), los oro y por ultimo los diamante (los reyes de los dormitorios los cuales encabezan las listas de popularidad); en fin.
-sabes Ken, no importa, ya que yo la amo-hermosa, perfecta y muy carismática Sabina era una reina en todo el sentido de la palabra-el me señalo a lo lejos
-¿vez a Ciel?-señalo a "la reina roja"
-si la veo-Ken aun siendo mi mejor amigo estaba enamorado de ella, Ciel, muchas personas de mi dormitorio, pensaban que ella era muy particular, pero ante mis ojos era solo bonita
-Ciel, ella si es hermosa!-el en verdad estaba ciego de amor. Como todas las tardes antes del atardecer esperaba a Sabina en el bosque, ya que eramos "novios secretos" y esta era la única forma de estar juntos.
-Sabina, te extrañe-ella me abraso, yo toque su hermoso cabello rubio; ella me beso
-Neo, te amo-me sentía tan feliz-pero ya me tengo que ir, lo siento-ella corrió de mi lado
-espera...-me dejo allí solo,  una risa de tras de mi me sorprendió, al voltearme unos ojos color plata me miraban, eran tan impactantes llenos de tormentosos secretos; una piel blanca como la nieve contrastada por ese cabello negro-reina Ciel-dije sorprendido
-te sorprendí disculpa-su voz era muy dulce; ella estendio su mano hacia mi-ya sabes quien soy, me dirías tu nombre-dude al tomar su mano, fina y pequeña.
-soy Neo-ella me sonrió aun mas que antes
-ya va a, anochecer que tal si regresamos al dormitorio, me podrías acompañarme?-ella poseía algo, un don el cual me atraía hacia ella, un carisma innegable.
-si, con gusto mi señora-me incline en reverencia; durante el camino no hablamos, hasta que ella paro a recoger una rosa, la tomo con sus delicados dedos y me la dio.
-sabes me agradas mucho, te pareces a alguien a quien conocí-ella me miro a los ojos, otra vez con su mirada penetrante-por eso, te diré esto: ten cuidado, aquí no todo es lo que parece a que se refería con tal seriedad?
-de que hablas?
-sobre tu novia-me enfade
-no creo que sea de tu interés, así que, por favor no interfieras- ella se rió; con su mano derecha soltó la cinta de su cabello negro; sin preguntarme la ato en mi mano.
-ten esto te protegerá-me sorprendió ver, que no estaba molesta-a cambio quieres ser mi amigo Neo-como dije antes, ella tiene carisma.El dormitorio rojo, en mi definición este lugar... bueno es ruidoso, lleno de música y fiesta, no es el lugar donde deseas estudia en tiempo de examines, aun con los matices de colores de la alegría y el exceso, sentía que este no era mi lugar en la escuela; mi deseo es estar al lado de Sabina  y no en este dormitorio; algo sonó afuera de mi ventana, como un toque, la abrí, pensando en que seria Sabina (algo ridículo de mi parte); al abrir, unas manos me jalaron al techo, sentí como si fuera a morir cuando mire al suelo, una rosilla burlona fue lo que me hizo reaccionar y ver que estaba en el techo.
-demonios!-dije frustrado-por que hiciste eso?!-ella me saco la lengua
-parecías muy aburrido-me contesto, con su voz dulce
-no lo creo, ademas si somos amigos, no intentes matarme de un infarto, quieres!-ella se rió a un mas de mi
-eres muy joven para morir de algo así, ademas solo quería ver tu exprecion-ante mis ojos, ella no tenia ningún sentido, era extraña y algo fastidiosa, pero un así sus ojos eran, tan indescifrables .
-no deberías de estar en el salón, llevando la gran fiesta?-ella dejo de sonreír
-no, la verdad, es aburrido estar rodeado de personas, sonreír y platicar de cosas, que no te interesan-ella miro al cielo, con una gran sonrisa-prefiero estar aquí, cuéntame de tu vida Neo-me seguía sonriendo, con facilidad
-que quieres saber?-le dije, ella pensó un momento
-háblame de todo!-dijo con energía, suspire y le conté acerca de mi familia y niñees,  ella parecía satisfecha y feliz, algo extraño, entre mas le hablaba mas fascinada; entre mas hablaba mas deseos tenia de conocerle a ella también, cuando termine de contarle de mi vida, la mire con pena-quieres saber de mi, no es así?-ella parecía leerme fácil mente
-si
-mis recuerdos están muy borrosos de ese entonces, recuerdo que mis padres murieron cuando tenia como seis o siete años, el pueblo donde vivía, estaba cerca de las montañas, recuerdo el aroma a flores y la fría nieve de invierno, también recuerdo que no fui feliz, hasta que cumplo...-ella suspire-no importa-ella se inclino  en mi hombro-hueles bien-ella se quedo dormida, en mi hombro, intente llevarla con gran dificultad a mi cama, cuando la puse en ella, note que su piel estaba fría, asi que la cobije esperando calentarla aun que fuera un poco. Otra vez esos extraños y peculiares sueños, los labios de una chica, la sangre que corría entre la nieve, una imagen aterradora de un cuervo que no se apartaba del lugar, sus ojos rojos como la sangre misma, me perforaban, "no te alejes de mi"... cuando desperté estaba solo otra vez,  había una nota en mi frente:
 
he regresado a mi habitación, gracias por prestarme la tuya. nos vemos mañana!

Como todos los días levante, me bañe y me mude, sin olvidar de la cinta roja de Ciel que ahora era parte de mi vestuario de ahora en adelante. La gran escuela llena de pasillos y escaleras, una obra de arte, sin imperfecciones, llena de grandes salones y  cristales, una palacio a decir verdad; me senté en mi lugar enfrente de la ventana que daba al jardín donde se daban las clases de educación física; solo para verle a ella, a mi querida Sabina.
-ya estas fantasíando?-me dijo Ken, en tono de burla
-solo estoy mirando, tienes algún proble...-el miro mi muñeca, parecía enojado-que pasa?
-que haces con eso?-el me señalo-no me digas que ahora, vas en contra de ella?-lo mire a los ojos
-es solo una amiga-le aclare
-si, como sea-el tomo sus cosas y sentó en otro lugar; la clase estaba por comenzar, cuando llego Meika, el rey rojo, el era conocido por todos, por su postura muy ecuánime y su mirada completamente firme, el llevaba una nota y se la entrego al profesor, el se volteo y por un instante pensé que me sonrió.
-podría acompañarme el alumno Ken-Ken se levanto-sera rápido, pero no creo que vuelva, no en un tiempo-algo en ese comentario, no me pareció normal-muy bien nos vamos-durante las clases, no me concentre, había algo que no estaba bien y eso me molestaba; al terminar las lecciones, decidí hablar con el maestro.

-disculpe profesor?-el era del tipo de hombre, que le gustaba el formalismo y la etiqueta (posiblemente por que nació en la época de la cultura de mundo y los modales del habla); el me miro con ojos cansados.
-si, que desea?, señor  Neo -tal vez si toma un poco de la actitud de Ciel, conseguiría mejores resultados
-profesor, quien llamo a Ken?-el no pareció, tomar encenta mi gesto.
-no creo que sea de su incumbencia, pero fue el consejo estudiantil, de otra manera, ese chico desalineado del señor Meika, vendría por aquí, esos rufianes- ahora que lo recuerdo, el profesor no le agradaban , ni Ciel o el, por algo que había pasado en una de sus clases.
-Muchas gracias-apenas supe, me marche de allí, corrí hasta el salón del consejo consejo, cuando entre a allí, Sabina aun se encontraba allí, la abrace; ella me empujo-que pasa?-ella me sonrió
-aquí no es el lugar, que tal si nos vamos hoy en la noche-ella me dio un papel, como Ken miro mi mano, con delicadeza, quito la cinta y me beso.
-así esta mejor, el rojo no es tu color- su maravillosa sonrisa, que me llenaba y me hacia olvidar de todo. Ya era tarde, así que decidí escabullirme por el tejado, como lo hizo Ciel, cuando baje, camine un poco y la vi, ella camino hacia mi.
-hola-le dije, ella camino y me dio la espalda-Ciel-me voltee
-espero que no te suceda nada hoy-su voz parecía temblar
-Ciel, tal vez, mañana podamos comer juntos?-ella no me contesto, solo se alejo de mi.Jamas pensé que ese día, mi vida tendría un jiro de tal magnitud.
Caminando por las calles de la insegura cuidad, solo para ver a quien yo mas amaba, pero aun solo recordaba las ultimas palabras que me dijo Ciel, desde hace dos días, en que por cosas del destino, llegamos a ser amigos, Ciel nunca me miro de esa manera, sus ojos eran tan fríos, sin emoción evidente; alguien tomo mi mano.
-que sucede te sorprendes de verme?-sus ojos azules como dos cristales a la luz del sol, que trastornaban a mi corazón, le sonreí.
-si, pero estoy feliz-ella me beso la mejilla-a donde quieres ir?
-quiero ir, a un club llamado "media luna", me han dicho que allí es muy interesante-caminamos unas pocas cuadras hasta llegar a un lugar, una extraña taberna, llena de frenesí y humo, el guardia, le dio una macara a Sabina y entramos, era algo extraño, la mayoría no utilizaban mascaras y los pocos que si, estaban en grupos de personas que parecían estar rechizados por esas figuras misteriosas-es hermoso no crees, Neo?-la mire a los ojos y vi el mismo encanto de los que intente descifrar en ella.
-si, es interesante Sabina
-muy bien buscare un lugar donde sentarnos, a estas horas hay una obra de teatro que deseo ver, ve a la barra, mientras busco lugares-ella desapareció de mi vista, así que hice, lo que me dijo, me senté en la barra, el cantinero sin perder tiempo, me sirvió algo color purpura.
-disculpe-el me miro-no se si puedo pagarlo-una mano tomo mi bebida, era un joven con mascara
-es por parte de la casa-me dijo con una voz muy apacible-así que no te preocupes por el precio
-gracias, soy Neo y tu?-el me sonrió
-soy Sakuya, el rey de los vampiros del este-que tipo tan extraño-es solo una broma-el me miro a los ojos- te gusta este lugar?
-no, es extraño y algo no encaja-el tomo una copa y tomo
-si es verdad, creo que te confunde por que unos llevan mascaras y otros no, verdad?
-si-el miro a su alrededor.
-como a muchos, lo pasa es que las mascaras son un símbolo, cazadores y los otros son la presa-el se rió-pero eso no es todo-una luz se encendió-alguna vez, has visto la actuación de un lugar como este?-el telón se abrió, una mujer de cabello negro, estaba  allí, se peinaba con una sonrisa, me recordó a Ciel-mi historia favorita-dijo Sakuya

-"había una ves"-empezó el narrador-"una hermosa mujer, un ángel de cristal , cuyo destino acabo-la luz se apago y volvió, ella estaba  inerte en el suelo-ante los crueles humanos, que no cuidaron de un tesoro, como lo era ella-dos mas aparecieron, uno de mascara roja y el otro de mascara negra-"pero..."-el hombre rió-"los cazadores, vieron el gran tesoro, que estaba apunto de desaparecer-el de la mascara roja, se arrodillo y la beso-con un beso, el cazador la salvo de la muerte-ella se levanto-tan hermosa y inocente, ella los amaba a los dos, aun no conforme con eso uno de los cazadores le pidió su entero corazón,pero al ser imposible, algo terrible paso, una tragedia en verdad-vi que Sakuya se volteo,  cuando yo volví a mirar, solo uno estaba allí al lado de ella, me levante y busque en el escenario al otro, pero no estaba-el amor volvió loco al cazador y como vemos a muerto el que tal vez fue el amor y con eso mis amigos nos despedimos de hoy"-los aplausos sonaron junto al abucheo de los espectadores fueron el fin de una corta obra, mire otra vez a Sakuya, el no aplaudía a pesar de decirme que era su favorita, el se movió y me sonrió.

-ha muerto el rey del oeste-dijo con un poco de pésame-y yo el rey del este me retiro a cazar, nos veremos algún día, si es que es posible- ese joven no parecía estar bien, después de la obra de teatro, parecía que lo afecto profundamente; Sakuya  que misterios guardaba su alma.

Mis ojos buscaban entre la gente a Sabina, cuando la encontre, ella estaba saliendo del lugar, asi que la seguí, intente llamarla pero no me contestaba, corrí hasta el callejón, era tan oscuro, podía escuchar algo , como si alguien tuviera dificultad para respirar.
-no te acerques-Sabina parecía extraña, cuando me acerque choque contra algo, resbale en el suelo, estaba mojado, algo me empujo, era muy fuerte-te lo dije-fue ella?, que fuerte era-ahora se completamente mio-sus besos y carisias forsadas, que queria de mi..., sin darme cuenta perdi la conciencia, me sentí dedil, que diablos pasaba no me podía mover, levante con mis fuerzas restantes mi cabeza, mis manos estaban atadas, había mucha sangre alrededor de mi cuerpo y el suelo-oh!, ya despertaste-unas manos sumamente frías tomaron mi rostro, era Sabina-te vez muy mal-ella se rió, yo estaba confundido-sabes algo, mi querido Neo-no podía ni hablar-yo nunca te he querido, es mas tu rostro se me hace asqueroso-ella me enseño una daga, me corto el rostro y se rió mucho mas-tu sabor, es muy bueno-ella lamió mi rostro-es una lastima , que tengas que morir, por saber mi secreto-de que hablaba?-estas confundido verdad?-ella se acerco mucho a mi rostro-mira mis ojos y veras que no soy humana-al verlos note que sus ojos eran los de un felino-a decir verdad una vez lo fui, como muchos en esa falsa escuela-recordé las palabras de Ciel, sobre que fuera cuidadoso, que doloroso ha sido el no escucharla
-Ci...el..., te...nia raz...on-le dije, ella me golpeo
-Ciel es un estorbo, ella con su moral falsa y todos sus principios de no asesinar a nuestras presas, es tan frustrarte ver como tu te sentías atraído por ella y no satisfecha con eso,  hasta te marco para que yo no te lastimara-asi que Ciel, era como Sabina.
-q...ue e..re..s?-ella se aparto de mi
-yo soy inmortal, una asesina de naturaleza, soy un vampiro y te matare-no se cuanto tiempo estuve alli, antes de que todo se pagara detrás de mi, cuantas veces ha cortado mi cuerpo en busca de la sangre que tanto deseaba, debió de ser muchas...

tuve un sueño, un jardín de arboles blancos por la infinita cantidad de flores, una chica bailaba allí sola en medio de ellas, a lo lejos yo la miraba, era tan lejana y tan preciosa, " sabes por que me gustas, por que solo tu, me miras de esa manera, como si solo yo existiera para ti.", su sonrisa...que hermosa se veía en su piel blanca, "pero la sangre, es la sangre y por eso, no te puedo ni debo amar", vi una lagrima deslizándose por su piel mientras se detenía, los pétalos de las flores se volvieron rojos, se volvieron sangre y ella...

-que alivio!-mi vista era borrosa parece que pasaba, donde estaba, que me sucedió?-Neo no intentes moverte, debes de estar acostado-tome esa mano y recordé todo lo que había pasado; con todas mis fuerzas la lance a otro lado, fue algo instintivo, cuando la ataque, pero ella me tomo del cuello-respira, intenta aclarar tu mente Neo, yo soy Ciel-ella se aparto o eso pensé, que me pasaba, intente caminar pero solo podía un poco-no te muevas, te puedes lastimar.
-que dia..blos me sucede, Ciel?-suspiro o eso me pareció
-debo empezar con la razón, que te trajo aquí, creo que es mejor-estaba enfadado y ella dándole vueltas al asunto-tu ex, casi te mata, perdiste mas de la mitad de la sangre que tenias en tu cuerpo, lo que causo que no recuerdes algunas cosas y una hipotermia, pero eso no es todo, cuando llegue, solo te quedaban unos minutos de vida, así que-hubo silencio por un momento-tuve que darte un poco de mi sangre, lo suficiente para que te volvieras igual a nosotros-vampiro, hasta el momento es significado de vampiro para mi es ser un asesino a sangre.