Han pasado más de once meses desde la última vez que la vi, un año en el cual he retomado todos esos hábitos que alguna vez poseí, desde poseer mujeres jóvenes por su sangre, hasta retomar mis días en la música; ahora soy líder de una banda que toca en bares de vampiros y no solo eso una estrella humana, las cartas de Ciel son lo único que tengo con su aroma y no me es suficiente, deseo más de ella que solo su aroma o su cuerpo, deseo poseer su corazón y hasta el último fragmento de su alma, necesito de ella, como las plantas necesitan del sol y el agua, como un instrumento necesita su ritmo y las manos diestras que lo tocan, la necesito porque ella es mi veneno y como tal invade mi cuerpo, certeramente en busca de mi destrucción.
Neo, las hermosas rosas que crecen en este palacio, no son tan bellas, aun cuando su color es como la nieve blanca y pura, sin un ápice de ningún contaminante, sin embargo ya no son hermosas porque mi corazón se congela poco a poco por tu ausencia, deseo verte pronto mi cuerpo pasa por una abstinencia por la falta de tu amor, deseo que vengas para el festival de blanco ven de traje de etiqueta, te tengo una sorpresa!
Se a lo que se refiere, el amor desde el punto de vista de un vampiro, es no solo el deseo o la pasión, es más que eso, si por nosotros pudiésemos le daríamos a nuestra pareja hasta la última gota de nuestra sangre solo para alimentarle, no incluso si nuestra pareja está a pocos momentos de la muerte, nuestro cuerpo lo protegería, ya que sin ellos no somos nada de nada, somos solo una sombra dejada atrás de la vida mortal, solo el amor nos mantiene cuerdos, ya que la sangre nos vuelve animales, después de un tiempo ese placer que tanto nos agrada, nos devora como la culpa a un asesino humano, es por eso que necesitamos a otro de los nuestros que llene la soledad, causada por la sed; en mi caso necesito a Ciel mas que a nada, ni la sangre de las mujeres con las que me he alimentado es suficiente, en mi pecho siento como se va mi alma perdiendo y volviendo las cosas, a algo sin sentido, la necesito por que la amo, ya no interesa otra cosa, solo su amor me hace ser feliz, estar lleno de él me da un lugar al cual necesito regresar, ese lugar sin dudas debo regresar, es curioso las cosas que pasan para que uno pueda apreciar las cosas y también que los opuestos son atraídos, un rey en nuestra sociedad es marcado desde nacimiento, vampiros nacidos por padres vampiros de sangre pura, yo soy uno y como rey debí aceptar mi cargo con ciertos parámetros que jamás tuve, pero he notado que Ciel siendo reina ha podido manejarlo todo a la perfección del caso, es más ha sido digna de llevar la corona, una reina de sangre entre mezclada, algo jamás visto en nuestra jerarquía, en el pasado al sangre debe estar por encima de los estatutos de lo bueno es decir por encima de lo establecido, por eso se crearon distintos niveles: la sangre de n vampiro un huma no es la más diluida ya que la raíz de la sangre pura es más distante, en pocas palabras guardias y cortesanos en la corte, los puestos nobles y de justicia los que fueron creadores por los más cercanos a la pureza, la otra categoría es aquellos que nacieron de un purasangre, Ciel como tal tiene el título de duquesa y por su trabajo en el ejército, comandante del ejército rojo título merecido, por su grandes atributos como guerrera. Siempre había deseado vivir sin mis miedos y ahora soy yo, mi verdadera personalidad, como tal hoy en día soy más fuerte, sé que la vida es importante y que si deseo protegerla debo cambiar mi poción pacifista y usar la espada maldita, que alguna vez me regalo aquel extraño ser de ojos rojos, en mi cumpleaños diecisiete.
-oye tu remedo de vago, en que piensas?-le sonreí a mi hermano, él y yo hemos estado viviendo juntos para estar al corriente, el parece estar mejor desde que Morgana se marchó de nuestras vidas
-estaba pensando en aquel se extrañó ser que nos visto en nuestro cumpleaños hace tanto tiempo-Sakuya me sonrió-lo recuerdas?
-la verdad, no mucho, recuerdo, que sus ojos eran del color carmesí de la sangre y era colido, creo que nos dijo algo como: “regresare alguna, hasta entonces, no olviden promesa si no, les devorare el corazón”; no recuerdo más que eso, dime siempre te quise preguntar por qué tu espada obedece a Ciel?-la razón era simple
-ese ser me dijo que mesclara mi sangre para darle pensamiento y mis sentimientos, pero también su sangre la cual logro que tuviera vida, su instrucción fue: “ella te obedecerá porque cree en ti, como yo, protegerá a tu seres queridos y a quien ames sin importar que”; creo que ese ser supuso lo que pasaría y que fue lo que te regalo a ti?
-me dio un cristal de color rojo, es hermoso y es mi tesoro, nunca he dejado a nadie verle.
-enserio y a mí-me negó con la cabeza
-no, soy muy posesivo, además de eso me dio su palabra-se rio
-en qué?-me señalo
-que me ayudaría a hacerte feliz, creo que se le olvido su promesa-su mirada triste y pensante, lo abrase como cuando crecimos juntos.
-no te preocupes nunca he dejado de ser feliz, creo que por eso no ha cumplido su promesa-lo despeine-tienes el cabello muy largo deberías cortarlo-el toco el mío
-y tú qué?, Ciel puede sospechar que eres Yuu y aun así dejas crecer tu cabello-era verdad, pero aun así, no me gusta tener el cabello corto.
-no importa inventare algo-el me miro
-sí que no la conoces, desde que…-él todavía se culpaba de mi “muerte”, que tonto e ingenuo es mi hermano-bueno ya sabes, Ciel se ha vuelto muy fría y astuta, lo suficiente como para no notar su cambio de actitud –eso también lo entendía.
-es verdad, pero Ciel no es solo eso, ella es apasionada y pertinaz, sin embargo posee un lado apacible , honesto, el cual se nota en cada una de sus sonrisas y sus miradas profundas-recordé su cuerpo en aquella noche de luna, hace ya tanto tiempo y la segunda vez que lo mire cubierto de agua.
-en que pensaste?
-no en nada en especial-el me entrego un sobre blanco con el perfume de Ciel
-Ciel debe estar extrañándote ya, lee la mejor-yo me fui a mi habitación, durante varias horas sentí su aroma, se solo por el aroma puro a rosas y cerezo, escondía la sed de sangre, ya con el plazo del año no se ha alim entado bien, será un placer ayudarle cuando por fin llegue el momento; abrí el sobre con delicadeza y su aroma se propagó por la habitación hasta desaparecer en las esquinas de la misma. Tome y abrí el papel, su letra delicada y de gran elegancia; empecé a leer la imaginando su rostro:
“Neo, ya el plazo del año se va finalizar, estoy asustada y emocionada ya que por fin estaremos juntos, antes de que llegues quiero que compres un traje de etiqueta y vengas el día del festival de las máscaras, será divertido, te tengo una sorpresa, hasta entonces, solo pensare en ti y en mi fantasía, que pronto se volverá realidad”
Interesante, una invitación a un festival en el reino blanco, quien diría que esto llegaría a sucederme, en la antigüedad Canon y yo luchábamos constantemente por el poder y la gloria y ahora, la mujer que amo es reina del reino más basto y extenso de los tonos del norte; la cuidad de fantasía, una tierra basta y hermosa, celebra todos los años el festival blanco, una noche en la cual los vampiros salen a celebrar “la noche de las flores”, en donde casan a una presa y la devoran en una gran fiesta, el rey debe de ir por el agua del canal que baña la cuidad , para la suerte de la misma, como sea solo son estupideces…
La noche por fin llego, la cuidad se llenó de rosas blanca, mientras que los caminos deslumbraban las luces y los botones de cerezo blanco, los vampiros se reunían, todos en sus máscaras negras aplaudiendo entre los humanos a la reina que pasaba, me hacer que para mirarle, se veía tan hermosa e inalcanzable, su figura estoica entre las aguas, vestida de blanco y rodeada de miles de flores, saludaba con facilidad , mostrando su rostro totalmente calmo, mientras se reunían los vampiros a admirar a su monarca , me acerque lo más que pude, pero… no fue suficiente, cuando la barcaza por fin, allí esquive a todos , hasta llegar a su lado, ni un segundo paso y ya tenía a sus guardias en mi yugular.
-Neo-dijo en casi un suspiro, arrojándose en mis brazos, la abrase con todas mis fuerzas-llegaste a tiempo , nos casaremos ya…-no si pensar en esto como una pesadilla o un sueño, estoy en medio de una noche de luna, tan cerca de la tierra, casi me hacía pensar que esta idea de casarnos estaba consentida por los astros del cielo; las flores blancas brillaban casi tanto como mi futura esposa, mientras caminaba hacia la altar, sus ojos brillaban como un par de estrellas de plata; creo que ya no tengo otra cosa que aceptar mi destino. Tome su mano y le sonreí, ella estaba ruborizada, debía de estar muy feliz, perdí mi negativa solo por verle, este sería nuestro comienzo, un tercer comienzo; la mire para dar mis botos de matrimonio:
-Ciel te tomo a ti como mi única, toma de mi lo que necesites, se mi único amor, jamás te dejare aun si el camino es largo y eterno, si las penas y las torturas son muchas, yo seré la mano que te ayude, quien seque tus lágrimas y comparta tu dolor, te pido que seas mi todo-coloque la sortija y tome mi daga, el pacto de sangre la única cosa que para nosotros los vampiros respetamos, la unión de dos seres, una misma sangre, un mismo cuerpo, una unión eterna…
