capitulo 9: Ángel negro final

-no, quiero irme-le dije, sentí como sus lagrimas caían en mi piel áspera por la falta de sangre-Neo bésame-sentí la ultima esencia de calor que podría tal vez recorrer mi cuerpo, ya débil de  la espera, el ultimo beso que recibí, fue el de Neo y deseaba mas, quería volver el tiempo y quedarme a su lado como el me pidió, ser felices, sin embargo como ya Milo lo había predicho yo he de morir hoy-adiós-fue mi despedida y el máximo dolor que mi alma y cuerpo  soportarían por el resto de la eternidad a donde fuera que mi alma fuese.

"Neo perdóname por escoger tu vida ante la mía, perdóname por abandonarte, perdóname por no poder ser lo suficientemente fuerte como para estar para siempre a tu lado, Neo solo deseo que seas feliz, aun que no sea a mi lado, yo no olvidare este amor, tu calor y tu sonrisa, esos recuerdos se irán conmigo, ya que en el cielo o el infierno te amare con la misma intensidad con la que te ame en vida..."

-Ciel!, vamos respóndeme, te amo, te amo, no me dejes Ciel, te lo suplico-su cuerpo se enfrío y se despedazo en mis manos, lo pude ver y lo pude sentir-por que?, por que si eres el destino por que ella?, por que te empeñas en separarnos, es que acaso no podemos ser felices sin que nos separes al final, que hicimos para merecer esto, por que no me tomas a mi, llévame contigo, este mundo no es nada sin ella, no es nada sin mi amor-el sol y los demás vinieron pero yo, yo ya no deseo vivir, sin ella, sin Ciel nada tiene sentido. A escasas horas del día  siguiente llegaron los refuerzos.

-donde esta mi madre!?-Erick estaba como loco-Neo donde esta?
-murió-dijo Milo-Ciel a muerto-Erick callo al suelo a mi lado, Milo estaba desconectado de todo, yo solo los miraba, yo solo guardaba silencio; por tres días fue su despedida, Sakuya y todos los demás se reunieron, pero finalmente que se podía hacer, como alguna vez dijo ella, lo que muere jamás regresa, así como el pasado no se puede cambiar...

en la mañana del día después de el silencio, mi corazón ya no tenia vestigios de latidos, solo quedaba una maquina que se movía al compás de los segundos, el dolor en mi pecho no finalizaba aun después de unas horas, la arena roja que deja atrás un vampiro se desvanecía poco a poco entre mis dedos, como las arenas del tiempo que se escurren para cometer el delito de separarnos por segunda vez; mire hacia atrás Milo por primera vez sonreía, aun cuando sus ojos estaban llenos de dolor y su piel humedecida por las lagrimas, el se sentó a mi lado.
-fue su deseo-me dijo con voz casi apagada, yo lo mire
-pero y que hay de mi?, acaso no pregunto por mi habilidad si sabia quien era yo?-el tomo un sobre que guardaba en su chaqueta.
-esta es su voluntad y te le leeré a ti – el no me contesto la pregunta

“querido Neo, si alguna vez llegas a escuchar esto es por que mi hora llego, no se cuanto ha pasado desde el día de nuestra boda, ya que escribo esto hoy, quiero que sepas que Milo me a revelado el por que debo morir y por mis razones lo acepto, sacrificare todo de mi si eso hace que vivas, por siglos te espere y a diferencia de esa vez ya no podrás regresar y yo escogí mi muerte a lo tuya, es difícil para mi, decirte esto pero quiero que no odies a nadie, no hay a quien culpar ni a ti o a mi, se feliz…”

-felicidad es lo menos que puedo tener, si tu no estas aquí, alguna vez soñé con mi pasado y ahora únicamente en mis sueños podré verte, seré capaz de  abrazarte?, solo en ellos, lograré sostenerte entre mis brazos y se tal vez se sentirá tan real que olvide tu muerte, pero al final solo será un sueño, que deja en mi la herida sangrante de mi sentir, todavía siento el dolor y tu amor, ese amor que sentiste que te llevo a sacrificarte por mi. De alguna manera siento que sabia que nunca te quedarías a mi lado y que alguna manera me dejarías atrás, Ciel, solo tu has sido y seres la única; ni el sol de esta mañana podrá calentarme, como desearía el verte, el tocarte aun que fuera una vez mas a cambio iría mil veces mil al infierno, solo por ese momento, solo por verte una vez mas, aun que solo sea una mas...